Este año Uwe Rosenberg vuelve a la carga con un par de títulos siendo A Feast for Odin uno de los más esperados. Esta vez aborda una temática de vikingos y en una caja más grande que la de Caverna o Fields of Arle (sí, es posible) que se podría definir como la fusión de Fields of Arle y Patchwork.
En realidad, Patchwork surgió durante el desarrollo de A Feast for Odin y es que la mecánica en torno a la que gira el juego es el puzzle espacial al estilo Tetris que Uwe convirtió en Patchwork haciendo un alto en el camino.

El juego toma prestadas cosas de sus otros juegos para que sus detractores puedan entonar a placer el «Siempre hace el mismo juego, un Agricola 4.0…» etc. Así nos encontraremos con una fase de alimentación, animales que crían, cartas de oficios, y por supuesto colocación de trabajadores.
En este caso la madera se reduce a la mínima expresión pero nos encontramos con dos bandejas rellenas de contadores por las dos caras. En función de su color sabremos lo valiosos que son: rojo,naranja,verde y azul siendo el azul el más valioso.
En nuestro tablero tendremos una matriz con un montón de símbolos, la mayoría de puntos negativos. Con las losetas que consigamos podremos ir tapando estos símbolos, aumentando nuestra producción y también reduciendo los puntos negativos. Empezaremos con varios vikingos e irán aumentando automáticamente cada ronda.

El tablero de selección de acciones es enorme. Hay más de 60 acciones a escoger. Vale que algunas se pueden agrupar como su fuera una por ejemplo: comprar 1 barco, comprar 2, comprar 2 y algo más, comprar 3. Pero aún así las primeras partidas nos sentiremos abrumados.
Estas acciones se organizan en columnas y para hacer las de la primera necesitaremos 1 vikingo, la segunda 2, etc. A parte, en función de la columna podemos recibir un bonus como colocar oficio o robar oficio (columnas 3 y 4).
Para aderezarlo todo, tenemos más islas que podemos descubrir y que tendremos que rellenar, cartas de armas para cuando vayamos a cazar, dados para determinar el resultado de algunas acciones, una fase en la que tendremos que tener alimentos para poder celebrar el gran banquete, cría de animales, reliquias…
Sin duda el tipo de juego que espera un fan de Uwe. Aunque Fields of Arle no es de mis preferidos sin duda tengo muchas ganas de agregar A Feast for Odin a mi estante.
Nos vemos!
pintaza!