Un juego de bazas conjuntas en el que los jugadores intentan desarrollarse formando conjuntos bienes de cartas iguales o distintas. La mecánica principal consistirá en colocar una serie de cartas en un mercado común e intercambiársela entre los participantes para intentar formar estos conjuntos. El problema es que esta mecánica es poco ágil, aburrida y caótica, especialmente en las primeras partidas. Lo único destacable del juego son las grandes ilustraciones de Vincent Dutrait.