Billar con dedos, en menos espacio y más barato. Gran juego de habilidad. Cuando juegas bien no se vuelve más aburrido, sino más puñetero. Muy entretenido para dos o cuatro jugadores, de todas las edades.
El referente máximo de los juegos de habilidad que brilla por su experiencia sensorial única, con el sonido y tacto de cada lanzamiento preciso generando una satisfacción inigualable. Su dinámica adictiva, junto con la facilidad para aprenderlo y disfrutarlo desde el primer disparo, lo convierten en un título ideal. Es cierto que su gran tamaño dificulta el almacenamiento, requiriendo espacio o soluciones creativas como colgarlo en la pared, y su precio puede ser una barrera aparentemente insalvable. Pese a estos inconvenientes, es una experiencia lúdica que justifica cada euro invertido.