Un buen diseño de Feld, que vuelve a un estilo cercano al de sus primeras grandes obras, con mecánicas sencillas y bien engranadas. Es cierto que no innova especialmente y la gran mayoría de conceptos pueden recordar a otros títulos, al menos en cuanto a sensaciones, siendo el factor carrera el elemento diferenciador. Tal vez su mayor problema sea la rejugabilidad, ya que en pocas partidas tendremos un esquema básico de actuación y difícilmente nos saldremos de dicho guion. Teniendo grandes diseños, este se queda a las puertas de una mejor calificación.