Un peso medio con mecánicas principales de draft, con un curioso sistema que restringe opciones, y colocación de losetas (con una serie de incentivos en varios frentes que convierte cada decisión en un pequeño dilema. Destaca por su magnífico ritmo y la sensación de estar tomando constantemente decisiones relevantes. Su mayor defecto es la producción, con unos materiales pobres y un diseño gráfico que, además de no resultar atractivo, se incurre en un fallo mortal que dificultad la preparación de la partida, pudiendo llegar a provocar errores. Afortunadamente es algo con lo que se puede vivir con un poco de organización y solo desluce ligeramente el conjunto global.
Carpe Diem es un entretenido juego de colocación de losetas en el que nos disputaremos con el resto de jugadores no solo las construcciones, sino también el prestigio que nos catapulte como el distrito más reconocido del Imperio Romano.