Un filler con ideas interesantes y relativamente bien hiladas, como el mecanismo de orden de turno dando paso al jugador más retrasado y lo ajustado de cada ronda a la hora de tomar cartas para conformar los sets requeridos por las bodegas. Sin embargo, se aprecian aristas en el diseño que degradan la experiencia de juego. Debería ser elegante y fluido, pero surgen dudas y no termina de enganchar.
La Viña es un juego de 2 a 5 jugadores con una duración contenida, con buena escalabilidad, con un diseño muy cuidado y unas mecánicas pulidas. No es un juego que pasará a la historia de los eurogames pero hará que pasemos buenos ratos. Su característica más sorprendente para mi ha sido la potente interacción que nos ofrece, positivo para algunos y negativo para otros, ustedes deciden.