Gran juego familiar que simula la construcción de un parque de atracciones con una mecánica de lanzamientos de dados y bloqueo de valores simultánea y frenética. Muy agradable de jugar, hará las delicias de los nostálgicos que disfrutaban de Theme Park (el videojuego). Además fue de los primeros juegos en utilizar elementos de cartón en tres dimensiones para desplegar en la mesa. Muy recomendable.
Cumple a la perfección lo que se espera de un juego familiar: sencillo, bonito, con espacio para desarrollar jugadas pero con el punto de azar para que los más novatos aún tengan opciones.