La Gaceta de los Tableros 30 Mar, 2016 Ver la reseña
7.5
El clímax del juego se produce a la hora de decirle al Sheriff lo que llevas en tu saquito. Ese momento de mirarle a los ojos, controlar los nervios e intentar, o no, colársela es un puntazo. En ese sentido el juego me recuerda mucho al poker. Mentir bien es un arte y los verdaderos mentirosos llegarán lejos en este juego.