Hallertau nos pone el papel de un pequeño pueblo de esta región alemana. Nuestro objetivo será el de hacer progresar la aldea a base de cultivar y criar ovejas como no podía ser de otra forma viniendo de nuestro amigo Uwe Rosenberg.
Cómo jugar a Hallertau
Hallertau a pesar de ser uno de sus juegos de caja grande tiene unas reglas muy asequibles. Durante seis rondas usaremos una colocación de trabajadores para conseguir recursos sembrarlos y jugar cartas que son el alma del juego.
La colocación de trabajadores es un tanto peculiar. En este caso tenemos cubitos de acción y cada espacio de colocación de trabajadores tiene varios espacios que incrementan en coste de 1 hasta a 3 cubitos.
Una vez este espacio esté lleno esa acción ya no estará disponible hasta la siguiente ronda que se eliminarán los cubos de las posiciones más elevadas.
Una vez terminada la colocación de trabajadores, toca recolectar de los campos, ordeñar las ovejas y utilizar estos recursos para hacer progresar los edificios de la aldea.
Hacer progresar estos edificios hará que la aldea crezca y tengamos más trabajadores para la siguiente ronda y también nos dará puntos de victoria al final de la partida.
La clave del juego son los cuatro mazos de cartas de que dispone. En cualquier momento podemos jugar cartas de nuestra mano.
Estas cartas tienen una condición en la parte superior ya sea de cumplir ciertos requisitos a pagar una cantidad de recursos. Al jugarlas obtendremos a su vez más recursos o habilidades que generan cada ronda recursos y como no: puntos de victoria.
Una vez terminadas las seis rondas procederemos a sumar los puntos de nuestra aldea, de las ovejas, joyas y recursos sobrantes más los puntos por cartas que suelen ser el grueso importante.
El jugador con más puntos será el vencedor.
Opinión de Hallertau
Hallertau es una grata sorpresa de Uwe que nos tenía acostumbrados a muchos refritos. En este caso a pesar de que no abandona su temática de cultivar y criar el juego consigue transmitir unas sensaciones distintas a sus otros juegos.
El juego no trae nada realmente innovador salvando quizás la colocación de coste incremental pero la mecánica de jugar las cartas es tremenda para los amantes de los combos.
Estas cartas nos presentarán pequeños retos que al cumplirlos nos darán jugosas recompensas y a veces más cartas para seguir combando. El puzzle para intentar encajar las cartas de la mejor manera sin descuidar el avance de nuestra aldea es sublime.
El tiempo de preparación y el mantenimiento entre rondas es mínimo y gracias a la enorme cantidad de cartas el juego tiene una enorme variedad.
De los cuatro mazos dos tienen cuatro versiones de 30 y 35 cartas respectivamente. El mazo de puerta nos sirve para arrancar nuestra economía y va aumentando la dificultad de las tareas para modular la exigencia del juego.
El mazo de granja por otro lado se centra en distintos aspectos del juego potenciando más unos que otros y aportando variedad. Los otros dos mazos mucho más grandes contienen cartas de tienda que producen cada ronda y cartas de puntuación bastante exigentes.
Una de las críticas que se le hacen al juego es que al tener estos mazos de cartas cabe la posibilidad de que un jugador robe cartas que le encajen con lo que está haciendo y le beneficien mientras que a otro no le encajen para nada y salga perjudicado.
Este es un factor que está presente en muchos juegos de cartas. En mi opinión hay dos factores que hacen que esto en Hallertau no represente un problema:
- La flexibilidad: el juego permite planificar cuando jugar las cartas. Si queremos ir a cartas de puntuación basta con robarlas pronto y tenemos el resto de la partida para adaptarnos.
- El coste en recursos: La mayoría de las cartas que dan puntos cuestan recursos así que esos puntos no son gratis, y esos recursos si no los empleamos en puntos servirán para otros menesteres o se transformarán en puntos de victoria.
Por otro lado si te gusta vivir al límite no hay nada más satisfactorio que robar una carta de puntuación en la última ronda y arañar 4 puntos más por tenerla medio hecha y poder finalizarla.
Veredicto
Hallertau es en mi opinión un gran juego de Uwe superando a sus dos últimos lanzamientos de caja grande Campos de Arle y Banquete de Odín.
El juego presenta unas mecánicas fáciles de entender con una gran variedad de cartas y alto poder de hacer combos. Además de un nivel de exigencia en la optimización tremendamente satisfactorio.
Todo aderezado con una excelente producción. Un juego muy recomendable y de lo mejorcito del año.
Hallertau es un juego de colocación de trabajadores y gestión de recursos que gracias a su sistema de cartas ofrece mucha variedad, combos y un puzzle de optimización excelente. De lo más recomendable de este 2020.
Os dejo a continuación un vídeo para ver como se monta el juego, un turno de ejemplo y mi opinión por si os apetece saber algo más del juego. Espero que os guste.