En Pipeline nos enfundamos en la piel de empresas petroleras con la dura tarea de refinar el crudo y venderlo a los cambiantes mercados. Deberemos comprar a buen precio, asegurarnos los mejores contratos y construir la red de procesado capaz de cumplir con todo.
¿Cómo jugar a Pipeline?
Pipeline es un juego de colocación de trabajadores o más bien selección de acciones ya que no hay limitaciones en el número de jugadores que puedan escoger una acción. En el tablero central disponemos de 9 acciones posibles y una en nuestra red privada de tuberías. Las acciones básicamente se podrían agrupar en:
- Comprar y/o vender en uno de los cuatro mercados de crudo
- Adquirir contratos de crudo y/o préstamos
- Comprar maquinas para automatizar el refinado
- Conseguir expertos que nos proporcionen ventajas interesantes a lo largo de la partida.
- Comprar tanques para almacenar crudo
- Comprar tuberías del mercado gubernamental
- Procesar crudo usando nuestra red de tuberías.
El juego dura tres rondas denominadas años con un número de turnos decreciente. En cada turno podemos colocar nuestro trabajador en una de las acciones mencionadas y realizarla. Opcionalmente cuando usemos las acciones del tablero podremos pagar 10$ extra para realizar una acción adicional adyacente. Finalmente podremos pagar 15$ para hacer funcionar las máquinas en caso de que las tengamos.
A medida que vayamos haciendo circular el crudo por nuestras tuberías se irá refinando en función de la longitud recorrida. Luego lo podremos vender en los mercados o bien a través de contratos o ofertas de compra para obtener dinero con el que volver a invertir.
Cuando termine el último turno del tercer año procederemos a evaluar las distintas «Valuations». Éstas nos indican objetivos que nos darán dinero al final de la partida: cantidad de tanques, tuberías conectadas a las máquinas etc.
Añadiremos el valor de los barriles que no hayamos vendido al dinero conseguido durante la partida y el que tenga más dinero será el ganador.
Opinión de Pipeline
Pipeline es un juego económico bastante directo, el objetivo es montar nuestro motor de generación de dinero de la manera más eficiente posible ya que el juego dura apenas 30 minutos por jugador.
El hecho de que en la tercera ronda haya muchos menos turnos que en la primera hace que a menudo en las primeras partidas nos embarquemos en inversiones que no podamos aprovechar.
Tras la primera partida nos daremos cuenta de que el juego nos propone una optimización de acciones de manera que seamos capaces de generar el mayor dinero posible con el menor número de acciones. La acción adicional que nos cuesta 10$ y que a priori te puedes plantear usar tanto como puedas de pronto se convierte en algo que debe estar más que justificado.
Las cartas de expertos son variables partida a partida y nos pueden modificar bastante el camino que vamos a tomar. Por ejemplo algunas cartas nos darán tuberías al inicio del año otras mejoraran nuestra eficiencia con máquinas o incluso modificarán el precio del crudo en los mercados.
Además su número es limitado y solo un jugador podrá comprar un tipo concreto de experto durante un año así que hay que estar muy atento al tema.
La producción es muy buena y solo hay que tener en cuenta que el juego ocupa bastante mesa ya que a parte del tablero central y nuestro tablero personal necesitamos parte para crear nuestra red de tuberías.
Por otro lado si no os gustan los puzzles espaciales es posible que lo paséis mal pues en el tablero central hay un montón de fichas de tuberías que mentalmente debemos intentar encajar en nuestro entramado para poder refinar el crudo en nuestros tanques.
Veredicto
Pipeline es un buen juego económico sobretodo si buscas un juego de corta duración. En Pipeline no ganará el que haga más cosas por turno o que mueva más dinero si no el que sepa hacer las cosas de la manera más eficiente.
Esto puede ser una pega si somos de los que nos gusta encadenar combos y optimizar al máximo nuestros turnos. Por otro lado si queréis tener sensación de progreso o evolución en vuestra empresa es posible que Pipeline os decepcione pues cuando tengamos la maquinaria a pleno rendimiento el juego ya terminará.
Algunos lo definían como el hijo entre Food Chain Magnate y Arkwright dos juegos duros y de larga duración y aunque tiene una retirada a ambos juegos más bien sería un nieto lejano. Si el juego durase más rondas empezaría a acercarse pero aún así le faltarían más opciones para tener más variedad estratégica.
De hecho incluso con esta duración se echa de menos algo más de variedad estratégica: las máquinas es muy raro que las podamos desplegar en el primer año especialmente si no sale su carta de especialista. La compra de tanques aunque recomendable no se suelen echar de menos. A parte de la compra de especialistas y los contratos el resto de acciones no dejan de ser distintos espacios con el mismo funcionamiento: comprar o vender crudo de distintos niveles.
Pipeline es un juego económico de 2 a 4 jugadores y de corta duración (30min/jug) en el que deberemos sopesar muy bien los costes de nuestras acciones para poder procesar crudo de la manera más eficiente posible y convertirnos en la empresa más rica al finalizar la tercera ronda.
Juegos alternativos
Arkwright es uno de los pesos pesados de los juegos económicos, con gestión de los precios en función de la demanda la producción, losetas que nos dan ventajas competitivas etc. Si juegas a Pipeline se te queda corto y no te asustan los juegos de 3+ horas Arkwright es tu juego.
Food Chain Magnate otra de las obras maestras de los juegos económicos. Gestiona tu propia compañía de comida rápida con un sistema de selección de acciones brillante y con unas posibilidades estratégicas tremendas. Puedes leer más en la reseña de Food Chain Magnate