Un diseño donde los jugadores trazan rutas personalizadas mientras gestionan tiempo y fondos limitados. La necesidad de equilibrar el avance rápido con paradas para obtener ingresos, junto a la búsqueda de localizaciones de aventura que otorgan puntos extra, invita a optimizar trayectos, generando momentos satisfactorios al enlazar turnos por haber ajustado el gasto de tiempo. Desgraciadamente, es un juego que no termina de despegar. Le falta un punto de imprevisibilidad, y el no poder medir las distancias de las cartas puede generar cierta frustración. Su integración temática es interesante, pero, en general, es un juego que se queda corto dentro de su categoría.
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