Reseñas

Djam es un juego de palabras donde los jugadores tendrán que ser rápidos creando palabras para llevarse los puntos y la victoria final. Un juego educativo para toda la familia.

City of horror es un juego de mesa de zombies para 3-6 jugadores, en esta reseña os contamos cómo se juega, cuáles son sus características y puntos fuertes (y débiles). Al tratarse de un vano intento de mejorar Mall of Horror, además haremos una comparativa con esa pequeña obra maestra.

En Zombis 15 dispondremos de 15 minutos para conseguir huir de la horda de zombies que nos persigue sin descanso. Un frenético juego cooperativo en el que se empieza hablando sentado y se termina de pie y gritando.

10 negritos es un juego de mesa cooperativo basado en la novela homónima de Agatha Christie. En él tendremos que encontrar al asesino siguiendo las pistas y siendo los mejores detectives.

Un juego de ordenar cronológicamente sucesos. En este caso eventos históricos. Un juego fácil de transportar, rápido y para no comerse mucho la cabeza.

Las gallinas tienen hambre y querrán comerse el mayor número de gusanos posible. Con este rápido juego de piezas similares al dominó, tendremos que conseguir más gusanos que los demás, si queremos ganar la partida.

¡Patada en la puerta! Mata al monstruo, róbale el tesoro e intenta apuñalar por la espalda a los demás aventureros del dungeon. Nada más divertido que eso y llegar a nivel 10 pasando por el cadáver de quien se ponga a tiro. ¿O no?

Os enseñamos a jugar a Mall of Horror, un juego de mesa de zombies y traiciones, descatalogado pero maravilloso. Uno de nuestros favoritos.

Sólo un aspirante a mago será el primero de la promoción de Arcanya, Magic Academy. ¿Serás tú? Mide tus fuerzas y tu destreza contra los otros magos evitando la esfera mágica que irá aumentando su poder. Un juego rápido de unos 30 minutos, de 3 a 10 jugadores y que está recomendado a partir de 6 años

Reseña de la versión de viaje de Catán, un poco más reducida que el original, pero con un maletín muy práctico para transportar. Tiene menos posibilidades de juego, pero sin perder jugabilidad de este clásico de gestión de recursos.

Los pastos están llenos de ovejas que necesitan ampliar horizontes, conocer mundo y expandir su reino ovejil. Un juego para toda la familia.

Qwirkle es un juego de estrategia abstracta para 2-4 jugadores, ganador del premio Spiel des Jahres en 2011 y de Mensa Select en 2007, donde romperte la cabeza para ganar será tu única preocupación.

Un juego totalmente narrativo en donde seremos testigos de todo tipo de aventuras y situaciones ambientadas en la Baghdad más fantasiosa. Olvidaos de darle al coco y sed espectadores de este cuento. Recomendado para: novatos y ámbito familiar.

Defended la ciudad antes de que las hordas de monstruos arrasen con todo. Un juego cooperativo con un despliegue en mesa espectacular pero que depende del azar en exceso, algo que hará que las partidas varien entre ser entretenidas o todo un suplicio. Recomendado para: jugadores de nivel medio y amantes del puro ameritrash.

Eurogame con una alta carga abstracta en donde gestionarás recursos y te desarrollarás de la forma más óptima para obtener todos los puntos de victoria posibles. Helios es un juego muy bien cerrado y desarrollado pero que no resalta entre la dura competencia con la que coexiste. Recomendado para: jugadores de nivel medio y amantes de los juegos abstractos.

Un juego de gestión de cartas que puede recordar a otros juegos de especulación con mercancías, añadiéndole un punto de caos que le sienta bastante bien, sobre todo a partidas con más de 2 jugadores. No es un imprescindible, pero ofrece suficientes satisfacciones como para mantenerlo en la ludoteca. El nivel de edición es magnífico.

El juego escala bien a 2, 3 y 4 jugadores, es bonito y con reglas bien explicadas. Además es accesible y absorbente. Para ser su primer juego, François Gandon ha entrado por la puerta grande. Muy recomendable.

Juego de forzar la suerte sencillo y efectivo, y con unas ilustraciones y piezas de gran calidad.

Un juego de desarrollo de cartas con una mecánica relativamente convencional, en el que destaca la ausencia de generación de bolas de nieve y una simbología muy reducida respecto a títulos similares, lo que lo convierte en un juego mucho más accesible que estos otros. Su problema es que no termina de arrancar y te da la sensación de ir siempre con el freno de mano echado, a pesar de ofrecer decisiones interesantes de forma continuada.