Reseñas

El juego referente en cuanto a mecánica de mayorías (control de áreas) se refiere. Sencillo de explicar y jugar, aunque difícil de dominar debido al cambiante estado del tablero con el movimiento de los jugadores. Con una mecánica de subasta por el orden de turno y unas cartas de acción que permiten actuar sobre el tablero mediante dos vías (la acción y la introducción de tropas), nos encontramos ante un juego atemporal que sigue funcionando perfectamente con una duración muy ajustada. Imprescindible.

Un juego de apuestas en el que los jugadores irán optando por diversas opciones en pos de obtener dinero, con apuestas parciales y finales. Aderezado con un nivel de producción bastante llamativo, resulta un juego demasiado descafeinado, en el que el azar tiene mucho que decir. Es cierto que se puede intentar controlar tirando de estadísticas. Pero no merece la pena esforzarse tanto para la experiencia de juego recibida.

La obra maestra de Xavier Georges. Un juego de colocación de trabajadores que repite la mecánica principal de Caylus (programación y ejecución) en el que los jugadores irán desarrollando la ciudad del rio Carson. Lo mejor, el nivel de interacción rara vez visto en un eurogame. Por esto, tal vez su peor defecto es que a dos queda algo descafeinado, mientras que a 4 o 5 jugadores es una auténtica fiesta de duelos.

Juego de colocación de losetas con un curioso patrón de colocación en damero. Cada loseta posee una serie de trabajadores que activan las losetas adyacentes, que serán losetas de jungla. Tendremos que ir obteniendo cacao para venderlo en el mercado, así progresar en diversos elementos. Un juego muy apañado y que ofrece una experiencia satisfactoria en poco tiempo. Una rejugabilidad relativamente baja sea su peor defecto. Aun así, recomendable.

Juego de agilidad mental inspirado en Jungle Speed, aunque eliminando la componente física. El juego fuerza duelos entre jugadores en el que cada uno de los contendientes deberá nombrar un elemento del grupo especificado en la carta del rival. El que gane el duelo se lleva esa carta. Así hasta que se acabe el mazo. Adicionalmente, existe un dado que será lanzado varias veces que fuerza duelos entre símbolos distintos. Ideal para los que no les gusta pegarse manotazos pero si disfrutan de la tensión de los duelos del Jungle Speed.

Uno de los grandes éxitos de 2013. Una carrera por alcanzar la costa oeste de Norteamerica con una expedición que iremos moldeando (mediante construcción de mazos) y cuya velocidad de avance dependerá de las acciones (cartas o colocación de trabajadores) así como del peso de la misma (personajes y recursos sin utilizar). Esto ultimo es su gran aporte: la gestión del exceso. Escala genialmente, aunque en partidas con muchos jugadores el análisis-paráliis puede hacer acto de aparición de forma desesperante. Muy recomendable.

Junto a Agricola, Caylus es el juego que asentó la mecánica de colocación de trabajadores (en este caso mediante dos fases: planificación y ejecución). Los jugadores toman el papel de constructores en el desarrollo de un castillo y sus alrededores, levantando negocios que permitirán obtener las materias y el dinero necesario para llevar a cabo tal empresa. El único pero que le encuentro es que, en partidas con muchos jugadores, se vuelve excesivamente táctico para mi gusto. Imprescindible si te gustan los Eurogames.

Gran juego con mecánica de colocación de trabajadores, en el que se desarrollan trayectos ferroviarios en Rusia. Uno de los elementos más destacables es el sistema de puntuación, en el que cada jugador irá acumulando puntos de forma acumulativa (cada ronda se obtendrán los mismos puntos que la anterior más lo que se haya progresado en la actual), de forma que al final de la partida se tienen varias centenas de puntos. Es una lucha constante por abrir y mantener diferencias en el ritmo de puntuación. Muy recomendable

Una de las obras maestras de Vlaada Chvátil. Un juego de civilizaciones mediante cartas en el que cada jugador intentará llevar a su pueblo a la supremacía absoluta mediante puntos de cultura. Estos se pueden conseguir de muchas formas. Cada turno es un pequeño paso hacia un final espectacular. Si se logra conectar con el juego, este proporciona experiencias magnificas. Eso sí, hay que ser conscientes de la duración y del entreturno. Hay que tomárselo con calma. Si te gustan los juegos de civilizaciones, este es de obligada adquisición.

Una de las sorpresas del 2014. Conjuga a la perfección dos estilos tan distintos como son los juegos de deducción y los eurogames más tipicos (realizando acciones y gestionando recursos). Tendremos que intentar convertirnos en el alquimista mas reputado preparando pociones y presentando teorias (o refutandolas). Mediante una aplicación para dispositivos móviles se consigue rejugabilidad y elimina la necesidad de que un jugador haga de master. Eso sí, una partida te deja mentalmente agotado. Muy recomendable.

Un juego que reimplementa diseños anteriores del autor consiguiendo un juego más accesible y atractivo. Partidas muy entretenidas gracias a una mecánica de desarrollo (mediante cartas y recursos) muy interesante y adictiva. Su mayor problema es la falta de interacción, lo que provoca que el azar tenga mucho que decir en la cantidad de puntos que se obtenga al final, por lo la competición entre los jugadores pierde interés.

Uno de los juegos sociales más famosos que existen. Los jugadores disponen de una mano de cartas con imágenes evocadoras. En cada turno, un jugador tendrá el rol de narrador y tendrá que ofrecer una pista sobre la carta que va a jugar. El resto deberá jugar la carta de su mano que más se adecue a dicha pista. Se mezclan y revelan todas esas cartas y los jugadores oyentes deberán intentar adivinar qué carta era la del narrador. Con jugadores imaginativos es una delicia. Y si carecen de ella, siempre se puede jugar con temas fijados. Su mayor problema es la rejugabilidad, requiriendo expansiones con pocas partidas.

Buen juego de colocación de trabajadores mediante dados (cuyos valores nos permitirán ejecutar acciones de forma más o menos potente) y gestión de recursos. Siempre se va con el agua al cuello en pos de acumular puntos mediante el viaje a determinadas ciudades y el cumplimiento de contratos. No ofrece nada realmente novedoso pero está muy bien engranado. Y puede presumir de una altísima rejugabilidad. Muy recomendable.

Un juego que no debe faltar en ninguna ludoteca. Mediante una mecánica principal de colocación de losetas y control de áreas desarrollaremos un tablero modular en el que habrá que ir completando estructuras para anotar puntos. Nos encontramos ante el título que más personas habrá introducido al mundo de los juegos de mesa (junto a Colonos de Catán). Apto para cualquier tipo de jugador y muy asequible económicamente (comparado con otros). Imprescindible.

Probablemente el mejor titulo publicado de un autor español hasta la fecha. Un eurogame para dos jugadores con pinceladas de wargame en el que cada jugador liderará una de las dos potencias en la Guerra del Peloponeso, desplegando hoplitas, galeras, extrayendo recursos, comerciando y conquistando polis (por la fuerza o por via

Me parece el mejor manager deportivo de mesa que he probado. Consigue captar la esencia de nuestro añorado PcFútbol en un juego de tablero, teniendo que gestionar un mercado en el que ficharemos jugadores, contrataremos empleados o firmaremos contratos mediante un sistema de puntos de acción y desplazamiento sobre un tablero con rutas de único sentido. Tal vez lo más negativo sea el farragoso sistema de cálculo de los niveles del equipo (afortunadamente hay una aplicación web que nos ayudará en esta tarea).

Uno de los grandes juegos publicados en el 2014. Toma la mecánica del mancala y desarrolla un juego sencillo de explicar pero dificil de dominar. Mediante un sistema de subasta del orden de turno, tendremos que ajustar lo suficiente para que nuestro turno sea rentable. Y con un nivel de producción sublime que justifica su precio. Eso sí, si no te gustan las ensaladas de puntos o tienes compañeros de juegos muy propensos al análisis-parálisis, es posible que este juego no sea el más indicado.

Uno de los mejores fillers de los últimos tiempos. Una mano de 13 cartas que tendremos que jugar en la mesa de forma que nuestros rivales no nos las levanten. Con unos conceptos muy sencilla se consigue una formula que engancha y no agota. Lo mejor son las reacciones en cadena que se producen al bajar cartas que actúan sobre varios jugadores. Muy recomendable.

Un magnífico juego de cartas y combos, con un tablero que añade la interacción de la que suelen carecer este tipo de juegos (aunque sin exagerar). Sin ofrecer nada realmente novedoso, funciona a las mil maravillas. Las cartas se dividen en cinco tipos y, cuando se juega una, se activan todas las de ese mismo tipo jugadas previamente. Con un balance muy cuidado entre el azar propio de un juego de cartas y el peso de las decisiones de los jugadores. Buenos componentes y esplendida rejugabilidad debido a las muchas combinaciones posibles. Como punto negativo, la partida puede alargarse mas de lo debido si los jugadores no se deciden a cerrarla.

Divertidísimo party en el que una idea muy básica como es la del juego de El Duro se transporta a la mesa. Interacción (robando cubiletes), prueba y error y un puntito de nostalgia gracias a las ilustraciones que recuerdan a Dragon Ball nos mantendrán pegados a la silla lanzando cocos como si nos fuese la vida en ello, celebrando cada acierto y soportando las burlas de los demás ante los continuos fallos. Lo peor es que, si los jugadores son poco comedidos, es posible que nos llevemos recogiendo cocos del suelo durante buena parte de la partida.